La historia del Kung fu esta completamente entrelazada al desarrollo de la cultura china, sus inicios se pierden en la neblina del tiempo, muchas antiguas leyendas están repletas de historias en donde el Kung fu tiene un papel central y el pueblo chino siempre ha venerado, respetado y admirado a quienes practican este arte. No es posible saber con precisión en dónde ni cuándo nació el kung fu (功夫). Según las leyendas chinas, se originó con el mítico emperador Huang Di hace más de 4 000 años. A este emperador se le atribuyen muchos tratados de astrología y medicina, así como también los primeros tratados de artes marciales que se escribieron para el entrenamiento de los ejércitos. Las primeras referencias escritas verificadas de las artes marciales en China se encuentran en los Anales de la Primavera y Otoño, libros clásicos de la literatura china que fueron escritos hace 2500 años.
Según la leyenda más propagada, el kung fu se le atribuye al monje que cruzó los Himalaya s de la India e introdujo el budismo Zen en China. A este monje se le conoce como Bodidharma o Damo y fue quien fundó el famoso templo Shaolin hace poco menos de 2000 años. Aunque es verdad que el templo se volvió famoso por los monjes guerreros a partir de esa época, las artes marciales ya se practicaban en China desde muchos siglos atrás como consta en los Anales de la Primavera y Otoño.
El kung fu de Wudang es igualmente antiguo, existen registros y sitios arqueológicos de los lugares habitados por monjes y ermitaños daoístas en estas místicas montañas que datan de hace por lo menos 1500 años atrás. Wudang y Shaolin son las dos grandes ramas del arte marcial chino, sin embargo existen cientos de estilos diferentes dependiendo de la región a la que se vaya, estilos que varían con el clima o la situación geográfica, estilos enfocados en algunas técnicas particulares, estilos desarrollados para vencer a otros estilos o para que las mujeres lo pudiesen utilizar contra los hombres, lo más probable y lógico es que el Kung fu haya evolucionado en distintos lugares a medida que la gente necesitaba defenderse de animales, de otras poblaciones rivales o asaltantes y que a través del intercambio cultural y económico se fue extendiendo y diversificando durante los muchos milenios de historia de la cultura china.
El Kung fu es un tesoro que pertenece no solo a la cultura China si no a toda la humanidad, es un conocimiento vivo que nos conecta con el pasado remoto, y su practica nos acerca al conocimiento interior y del mundo que nos rodea en el presente, dándonos las herramientas para vivir una vida plena, saludable y pacifica.